7 prácticas en redes sociales que no soporto
Este artículo apareció publicado originalmente en LoveCanarias, una web con la que colaboro habitualmente, dentro de mi blog, Simplemente Tecnología
Esta es una pequeña recopilación de cosas que no me gusta ver en las redes sociales. Seguro que te habrás encontrado con más de una, o con todas. Aquí van:
1. Las cuentas de Twitter «motivacionales».
No soporto esas cuentas de Twitter que lo único que hacen es soltar frases emotivas, para hacerte pensar, para que reflexiones sobre la vida… ¡anda ya! Cuando quiera eso ya me pagaré un psicólogo.
2. Los perfiles personales en Linkedin como de empresa.
Hay empresas que lo siguen haciendo. De vez en cuando me topo con perfiles en Linkedin con nombre y apellidos «Consultoría SomosLoMás«, que trabaja en «Consultoría SomosLoMás» y veo que tiene amigos y todo. A veces, incluso, «Consultoría SomosLoMas» quiere ser mi amiguita. A ver, es algo de 1º de EGB («este comentario ya denota mi edad«), los perfiles personales en Linkedin son para PERSONAS. Un perfil personal puede a su vez crear un perfil de EMPRESA. Tienen un tratamiento distinto. Yo no quiero ser amiguito de un perfil de empresa, yo me hago «seguidor» de un perfil de empresa.
3. Las cuentas personales de Facebook como de empresa.
Un caso similar al anterior, pero este es mucho más habitual. En Facebook existen perfiles, para personas, y páginas, para todo aquello que no sean personas físicas como empresas, organizaciones, productos, personajes famosos (vale estos si son personas físicas), etc. Los perfiles tienen «amigos» y las páginas tienen «fans«. En las páginas haces «Me gusta«. Pues eso, no me gusta ver un perfil personal que sea «Pizzería O Sole Tuyo» y que encima quiera ser mi amigo. ¡Pues no, oiga!
4. Abusar de los hashtags en Instagram.
Hay usuarios que no USAN los hashtags en Instagram, ABUSAN de ellos. No tienes que poner TODAS y cada una de las palabras que describan la foto como un hashtag, no tienes que poner siempre toda una retahíla de más de 20 hashtags típicos para conseguir aparecer en búsquedas, me parece una práctica muy molesta.
5. Poner en la bio de Twitter el «sígueme y te sigo».
Te sigo si me interesas, si no me interesas no te sigo, aunque tú me sigas a mi, ¿no se si me sigues?
6. Tener Twitter conectado a Facebook.
Lo siento pero tampoco me gusta. Reconozco que cuando empecé con Twitter lo hacía, pero uno va aprendiendo. Si te sigo en Twitter y te sigo en Facebook voy a ver lo mismo. No digo que no publiques la misma información en ambas redes, pero si lo haces hazlo respetando las «leyes» de cada red social. En Twitter ajústate a los 140 caracteres y en Facebook dale «vidilla«, pero no publiques un tuit en Facebook, queda muy feo.
7. Tener un perfil abandonado.
Es muy triste, como en verano ver a esos perritos vagabundeando por las calles sin rumbo fijo, si tienes un perfil en una red social hazle caso, no lo abandones, él no lo haría. Y si encima hablamos de perfiles de empresa, el hecho del abandono «a su suerte» dice muy poco de su estrategia de comunicación.
Foto bajo licencia CC de Flickr. Autor: Jason A. Howie (jasonahowie).
Creo que estoy de acuerdo en los 7 puntos citados. Aunque tengo Twitter conectado con Facebook…
Gracias por el comentario Agustín. Por supuesto, esta lista no son «mandamientos», son sólo impresiones mías y cada uno es libre de hacer lo que quiera. 🙂