Por qué he dejado de escribir en el blog y cómo quiero solucionarlo

No hay más que ver la periodicidad de mis últimas entradas para comprobar que lo estoy dejando morir. Y eso no me termina de gustar.
Inicié el blog a mediados de 2012 como grancanariaTIC.com (el dominio actualmente está libre), en un periodo crítico en mi (desaparecida en ese momento) carrera profesional, y donde pretendía dar voz a aquellos proyectos tecnológicos canarios que me parecían interesantes, fruto de mi inquietud por conocer qué se hacía en el mundo startup en las islas, aunque principalmente centrado en Gran Canaria.
Pocos meses después pasé de grancanariaTIC.com a lucasferrera.com ¿por qué dejar pasar la oportunidad de aumentar/mejorar mi «marca personal» usando mi propio nombre para el blog?. Pues sí que sí. Me lancé a la piscina con mi propio nombre en el dominio. A ello vinieron asociadas cuentas en Twitter, en Linkedin y una fan page de Facebook. ¡Vamos a por todas!
Escribir en mi blog me hacía sentir vivo y en contacto con la realidad. Asistir a eventos tecnológicos, de emprendimiento y estar en contacto con gente que (sobre)vivía de ello me había abierto la mente (cerrada durante mis últimos nueve años trabajando en una Administración Pública). Alucinaba con la cantidad de proyectos que se hacían en Canarias, y con la cantidad de gente que arriesgaba para sacar adelante ideas «innovadoras«. Con el paso del tiempo me di cuenta de que a veces hay mucha ilusión y corazón y poca cabeza en esos proyectos. Conocí gente maravillosa, auténticos cracks que viven la vida de una forma muy distinta a lo que yo estaba acostumbrado. También conocí algún que otro charlatán, pero eran los menos y no suelen durar mucho.
Fue una época muy prolífica para mi blog (más por cantidad que por calidad). Hacía entre 7 y 10 entradas mensuales. Viendo algunas de ellas reconozco que eran puro relleno y aportaban más bien poco, por no decir nada. Llegué a hacerme un pequeñíiisimo hueco en el mundillo porque era «ese tipo que tenía un blog que hablaba de proyectos canarios«.
Pero todo empezó a cambiar en 2014, coincidiendo con mi re-entrada en la Administración Pública y con un cambio de situación familiar que implicaba tener que cuidar a dos preciosas niñas (como cualquier hijo de vecino que es padre). Poco tiempo por el trabajo, por la casa, por las niñas (y por mi mujer, que no se enfade), y poco tiempo para escribir en el blog… ¡excusas!.
Cada vez iba contactando con menos gente, iba conociendo menos proyectos, apenas me dejaba caer en algún evento tecnológico o de emprendimiento. No tenía ganas (o no las sacaba), y todo fue haciéndose una bola hasta que llegado febrero de 2017 no se cómo retomar el tema… o sí.
En la recámara tengo dos entradas de entrevistas que hice a mediados de 2016 y que aún no he escrito, una sobre una herramienta online para preparar los exámenes a PMP y otra sobre una empresa fintech pionera en Canarias y de la que salí absolutamente impactado por el nivel técnico que descubrí a apenas unos cientos de metros de mi lugar de trabajo. No quisiera dejar a ninguno de los dos en la estacada, quiero contar sus historias, he de buscar tiempo para hacerlo.
Tengo que ser consecuente con mi situación. Ya no puedo asistir a tanto eventos. Ya no tengo tanto tiempo para concertar entrevistas con los creadores de proyectos, así que el material se me acaba. ¿Qué opciones tengo?
- Abandonar/cerrar el blog. ¿Con lo que me ha costado? No way!! Mi presencia en internet es importante (así lo considero). ¡Piensa otra cosa…!
- Tratar de retomar el enfoque de antes. Complicado lo veo. No tengo tanto tiempo para dedicarle a proyectos de los que me tengo que documentar (entrevistas, llamadas, videoconferencias, etc) y a los que tengo que dedicar unas cuantas horas para poder sacar una entrada de más de 1000 palabras.
- Dar un giro a la temática de mi blog. Hablando de lo que más conozco en estos momentos, mi experiencia en la Administración Pública en un área como la de Tecnología (y todo lo que ello conlleva). Y eso sin descartar que, en momentos determinados, pueda seguir colando entradas con proyectos e iniciativas que considero interesantes, sobre todo con los dos que he dejado en el tintero, y que «a Jobs pongo por testigo que hablaré de ellos próximamente«
Por tanto, reconozco que he sido muy perezoso en los últimos meses, pero que también debo hacer algo para levantarme. No se cuantos están al otro lado de la pantalla (bueno, algo sí me chivan las estadísticas de WordPress y el Analytics), pero lo que tenga que contar que al menos llegue a alguien, y que ello le pueda servir de ayuda, o al menos, que se pueda reír un rato.
No se diga más, ¡elijo la opción 3! Ahora me oirán hablar más del interesante y apasionante mundo de la Administración Pública (por favor, eviten caras de desagrado mientras leen esto), los funcionarios también tenemos corazoncito, y no todo aquí dentro son risas, desayunos y días de asuntos propios, pero eso lo iré contando, poco a poco…