Hack For Good LPGC desde dentro

H4G_2¡Quién diría que montar un sarao de día y medio pudiera movilizar a tanta gente, y de manera altruista!. Todo comienza por un día en que José Pablo Suárez, Director de Política Informática de la ULPGC me llama y me propone que le ayude a montar este «pollo«. Yo ni me lo pienso, y le digo que sí. Pensé que, bueno, total, es un día y medio, tampoco será para tanto. Hasta que te pones manos a la obra.

Yo era uno de los más de veinte colaboradores en la organización. José Pablo se rodeó de una legión de «becarios«, chicas y chicos jóvenes en los últimos años de carrera, pero todos con nombre propio (Cynthia, Lucia, Alejandro, Marco, Marco, Bachir, Víctor), y que trabajaron como el que más, por no decir que más que otros. Junto a ellos el resto de mortales, Sergio Sánchez al mando de la nave (como copiloto principal de José Pablo), Alejandro Ramos y Davinia de Vidania compenetrados a más no poder, ¡ah! y Fran Santana que aparecía como el Guadiana. Mentores de categoría como David Macías (ya bregado en estas lides), Claudia Bethencourt, Waldemar Lemanczyk, Carlos Hernández, Águeda Betancor, Alberto Perdomo, José Juan Cerpa, Yurena Cazorla (con una sonrisa siempre presente), Dunia Gómez, Silvia Benítez, Chedey Díaz y Juan Carlos Fernández (para mí todo un descubrimiento y con los que tengo pendiente una entrada en este blog acerca de su proyecto estrella, se van a quedar impresionados), y por último, y no menos importante un chaval (sólo 22 añitos) que me ha dejado con la boca abierta por su saber estar (y hacer), sus conocimientos, su actitud positiva y su buenrrollismo que ya quisiera yo a mi edad, Ramsés Cabello. Si me pidieran irme a una isla desierta con dos de los participantes de la organización del H4G LPGC sin duda alguna elegiría a Sergio y a Ramsés. Y a todas estas, yo por allí, en una esquina, sin molestar, hablando poco, lo justo, con mis cosas, con mi iPad y mi iPhone. Tomando notas, riendo, observando, pensando y maquinando.

Montar un Hack For Good no es fácil. Mucha comunicación interna y externa (salimos en casi toda la prensa escrita y online local, en más de cuatro emisoras de radio y en varias cadenas de televisión), bombardeamos Twitter, Facebook y LinkedIn. Nos pusimos en contacto con asociaciones, ONG’s, con Colegios Oficiales, con sponsors. Conseguir comida y bebida para unas 80 personas no es fácil, y que encima sea gratis o a cambio de muy poco, menos aún, pero lo hicimos. Hay que buscar un local, acondicionarlo, poner seguridad, limpieza, tener material de oficina, acreditaciones, camisetas, conexión a Internet robusta, ordenadores propios. Tenemos un grupo de Facebook interno para comunicarnos, un grupo de WhatsApp, Dropbox, Google Drive, Flickr, Youtube, y el email, por supuesto. Varias reuniones previas antes del evento, mensajes de ánimo, momentos de desesperación, momentos tensos, pero al final, momentos de felicidad, de ver las caras de los participantes, de oir las voces roncas de los organizadores por el esfuerzo. Premios, risas, abrazos y también alguna que otra decepción (no todos podían ganar).

  • Balance de la organización: Muy positivo. Conseguimos un grupo muy humano para organizarlo y un grupo de participantes excelente que han dado el callo.
  • Balance de resultados: Seis proyectos esbozados, todos de libre disposición para la comunidad, y algunos de ellos ya en marcha, en serio, esto no ha acabado aquí.
  • Cosas que mejorar: Por supuesto, pero eso no lo voy a contar, ya las estamos apuntando para hacerlo mejor el próximo año.

Solo me queda hablar de los proyectos, pero eso lo dejo para otra entrada. Sigan atentos.

7 verdades verdaderas del primer día en Hack For Good LPGC

H4G

Ya son casi las doce de la noche del primer día de Hack For Good Las Palmas de Gran Canaria 2013. La sesión terminó a las diez, pero llevábamos desde las cuatro de la tarde concentrados en el evento.

A estas horas, con esta luz y visto lo visto, sólo puedo sacar estas 7 verdades verdaderas del primer día en H4G:

  1. Los informáticos seguimos siendo iguales. Hace quince años que terminé la carrera de informática, y hoy me encuentro con más de una decena de informáticos en el evento. Seguimos siendo tipos con pinta rara, de naturaleza tímida, extrovertidos entre colegas de la misma rama y extremadamente reservados con desconocidos. Hay cosas que no cambian con los años.
  2. El mundo del diseño es más grande de lo que pensaba. Hasta hace tres semanas no sabía que en Gran Canaria había tanta gente dedicada al diseño. ¡Dios mío, son legión y van a dominar el mundo!, si no lo están haciendo ya. Yo pensaba que si dabas una patada a una piedra salían 100 informáticos pero además veo que detrás de ellos salen 90 diseñadores.
  3. Por mucho que planifiques, al final la gente hace lo que le da la gana. En la sesión habíamos preparado una hoja con todos los retos que se habían volcado en la web. A la hora de la verdad, de los seis proyectos que están en marcha, sólo uno de ellos había sido registrado previamente. El resto han surgido sobre la marcha en el día de hoy. ¡Viva la iniciativa de los participantes!
  4. Da igual las plazas que tengas, cuenta que viene sólo un 60% de los inscritos. Pasa en todos los eventos. Pones un número de plazas previstas, ves que están todas confirmadas, pero al final aparece un porcentaje mucho menor. Eso no es malo, y de hecho creo que es hasta beneficioso, se han configurado unos grupos muy chulos.
  5. Desvirtualizas a contactos de redes sociales y parece que los conoces desde hace mucho tiempo. Me ha pasado varias veces en estas últimas semanas, he conocido personalmente a «peña» que seguía solamente en una red social (Twitter, Facebook, LinkedIn) y me da la impresión de haberlas tratado hace años. Igual va a ser verdad que esto de las redes sociales tampoco es tan malo como lo pintan.
  6. Las charlas inspiracionales están muy bien al principio, pero la gente lo que quiere es marcha. Tuvimos dos horitas de charlas inspiradoras al comienzo de la sesión, todas ellas muy bien llevadas por personas que sabían mucho de sus temas, pero al final, lo que la gente quería era empezar con los retos ¡Para eso hemos venido!
  7. En el momento más inesperado, aparece una chocolatina TIRMA delante de tí.  No lo comento porque haya sido yo el encargado de repartirlas por todos los grupos, pero cuando ya llevas un par de horas reunido con tu grupo ¿a que sienta muy bien que te ofrezcan una chocolatina TIRMA que te permita cargar tu cuerpo de azúcar y seguir pensando con más claridad?  Pues eso, ¡me supo!

Mañana (HOY) nos espera otro día, EL DÍA. Hoy hay que darlo todo.  Veremos como llegamos esta noche.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies