Hace unas semanas, los chicos de patumovil.com me dejaron probar uno de los móviles chinos estrella de la tienda hasta ese momento, el Jiayu G4S (ver características en la página oficial). Jiayu es de esas marcas chinas menos conocidas pero con unos productos iguales o mejores que Xiaomi o Huawei. Pero probar no significa juguetear con él unas cuantas horas, no. Probar significa PROBAR. Significa desconectar mi iPhone5 y «vivir» con el Jiayu G4S toda una semana, tanto en entorno personal como en entorno profesional. Sí amigos, un tipo del lado oscuro de la manzana probando un movil chino con Andriod y todo ello en medio de la presentación del iPhone6 en el mundo. Hay gente que hace cosas muy raras, lo se.
Pues vamos a la aventura. Me llevo a casa el Jiayu G4S blanco y lo desembalo. Dado que lo voy a usar tanto para mi ocio personal como para mis herramientas de productividad en el trabajo, primero apunto todo lo que necesito instalarme. Lógicamente no voy a instalar todo lo que tengo en el iPhone, sino solo aquello que seguro necesitaré durante la siguiente semana. En el cálculo salen cerca de 50 aplicaciones. Pues vale. Pongo mi nano-SIM en un adaptador para poder insertarla en una de las dos ranuras de SIM del teléfono (sí, si, puedes ponerle dos tarjetas, como viene siendo habitual en los móviles chinos), conecto la batería y cierro la carcasa trasera de plástico. Pulso el botón de encendido y ¡allá vamos!. Conecto mi cuenta de Gmail y sincronizo mis contactos, correo y calendario. Voy a Google Play y empiezo a instalarme todo lo que necesito. Todo va muy rápido. El teléfono responde a la perfección con cada bajada e instalación de la aplicación, una tras otra se van bajando e instalando. Configuro cada una de ellas. Un par de horas después tengo listo el móvil. Yo suelo trabajar con herramientas que se sincronizan en la nube con lo que cambiar de teléfono no me supone un gran trastorno, es relativamente sencillo tener un entorno muy parecido al habitual. Ya tengo oficialmente en mis manos un Jiayu G4S y será mío durante los próximos días. ¿Qué me ha parecido la experiencia?
Aspecto general y acabado
Tiene líneas sencillas, el borde de la pantalla es metálico, mientras que la parte trasera es de plástico. Al tacto es agradable. Es sensiblemente más grueso que el iPhone5 y pesa algo más.
Pantalla
4,7 pulgadas, más grande que mi iPhone5. Con tecnología Gorilla Glass 2. La verdad es que la pantalla destaca. Me he quedado gratamente sorprendido.
Conectividad
Noté que la cobertura wifi en casa era algo peor que la de mi iPhone5, pongo un caso concreto. En la cocina suelo escuchar la radio por streaming, allí la señal wifi me llega, un poco débil, pero llega. Mi iPhone5 la coge sin problemas pero el Jiayu no conecta bien. La conexión 3G va fluida. El GPS sí me decepcionó bastante, su precisión en algunos casos dejaba mucho que desear, sobre todo en modo navegación con Google Maps, para geolocalizaciones puntuales sí iba bien. Pero esta característica del GPS es algo que ya el propio fabricante valora en su página con una puntuación de 1.5 sobre 5.
Potencia
Nada que objetar a sus ocho núcleos. Potencia más que de sobra para un usuario medio/avanzado, y ya no te digo para un usuario de WhatsApp, Facebook y poco más. Tú pídele que el Jiayu responde con soltura.
Sistema operativo
Android 4.2.2. Jelly Bean. Igual me esperaba una versión algo más reciente. Lógicamente no voy a entrar en la eterna batalla de si es mejor que el iOS, eso lo dejamos para otro momento.
Cámara
Monta una cámara trasera de 13 Mpx y y una frontal de 3 Mpx. Sinceramente soy de los que da muy poca importancia a los Mpx de las cámaras, lo que busco es calidad en las fotos que sacan. Las de Jiayu me han parecido correctas, sobre todo en exteriores. Más que suficiente para las exigencias de la mayoría. Me han gustado algunos efectos y los diferentes tipos de imágenes que se pueden sacar.
Almacenamiento
2 Gb + 16 Gb internos, y ampliación mediante SD. Yo no usé la SD, pero los 16 Gb son un buen punto de partida. Si eres de los que hacen muchas fotos recuerda sincronizar con servicios en la nube e ir borrando del terminal cada cierto tiempo. Si mantienes a raya esto y el almacenamiento del WhatsApp, los 16 Gb te deben ser suficientes, y si no ya sabes, a comprar una SD para ampliar.
Precio
Menos de 200 euros.
CONCLUSIÓN: después de una semana usando el Jiayu G4S: «Es un gran terminal, pero no es para mí«
Se que no estoy siendo justo, no podemos comparar mi iPhone5 habitual, que costaba 700 euros, con un Jiayu G4S que vale tres veces menos. Es evidente que el esfuerzo en diseño e investigación que hace Apple no lo pueden tener marcas como Jiayu, pero tampoco es su intención.
Puede que este no sea un terminal para mí, pero sí puede ser para cualquier persona acostumbrada a Android, que busque un terminal con una buena pantalla, una buena cámara, que vaya sobrado de potencia, que no sea muy exigente con el GPS y que no quiera gastarse una cantidad indecente de dinero. Y si encima cuenta con el servicio técnico local de patumovil.com son razones más que suficientes para hacerse con uno.
Me quedo con que éste ha sido un buen comienzo. Las marcas chinas han venido para quedarse y tienen su público. El Jiayu G4S ya tiene dos hermanos mayores que apuntan maneras, el G5 y el G6, sobre todo este último, con un precio de poco más de 300 euros puede hacerle sombra a muchos de su segmento, habrá que seguirle la pista.